El concepto del arte y sus liricas ocultistas y caóticas se manifiesta a la perfección a través del parlante, con una propuesta que no solo suena agresiva y despiadada sino que logra trazar una línea y adquiere un sentido más allá del mero hecho de sonar brutal.
Hay una exagerada cantidad de buenos riffs a lo largo del disco y pueden ser apreciados más allá de la furia explícita que arremete tus oídos, ya que todo parece estar lanzado en crudo. Hasta se pueden escuchar teclados que realzan y dan imperial majestuosidad a los rincones más lentos del álbum.
El ambiente te sumerge en una travesía a través del espacio, perdido en el mismo, cayendo y girando en la nada misma mientras distintos sucesos oscuros suceden a tu alrededor. Diferentes emociones se evocan en cada pista y dan una sensación de inmersión con la obra. A lo lejos un grito gutural que puede llegar a sonar ultra profundo, como también muy rasgado y ácido, te devuelve a tierra y te sacude como un relámpago en mitad de la noche.
Es un estilo que se ve poco en nuestro país ya que todos parecieran buscar lo "fácil" de digerir y lamentablemente (¿o es mejor así?) se pierden de obras como esta. Sin dudas tienes que darle una oportunidad.
